La enfermedad mental puede ser agotadora. Lo más probable es que una persona con una enfermedad mental como el trastorno obsesivo-compulsivo experimente pensamientos obsesivos o intrusivos, que pueden ser extremadamente agotadores. Actuar según estos pensamientos también puede requerir mucha energía.
Si estás estudiando, tratar de mantenerte al día con el trabajo escolar y otras responsabilidades también puede causar fatiga constante. Tratar de ocultar lo que estás viviendo para evitar la vergüenza, el estigma y el juicio puede agotar tu energía.
La fatiga constante puede dar lugar al síndrome de fatiga crónica o a la encefalomielitis miálgica. Te deja casi sin hacer nada, como lavar la ropa, preparar la cena, ir al supermercado o incluso ir a trabajar. También puede tener problemas para conciliar el sueño o mantenerse despierto. Por eso es crucial buscar servicios de psiquiatría en Miami para frenar estos efectos lo antes posible.