¿Se pregunta si padece trastorno bipolar? A pesar de la mayor concienciación sobre la enfermedad y cómo afecta a la vida de las personas, los estereotipos siguen influyendo en la forma en que caracterizamos e identificamos la enfermedad en nosotros y en nuestros seres queridos.
El trastorno bipolar es una enfermedad mental que afecta a unos 10 millones de mujeres, niños y hombres en Estados Unidos. Se caracteriza por fuertes oscilaciones del estado de ánimo, que van de subidas a bajadas y de bajadas a subidas. Las bajadas se caracterizan por la depresión, mientras que las subidas son momentos de manía. Los cambios de humor pueden incluso llegar a ser mixtos, y puede sentirse eufórico y deprimido simultáneamente.
El trastorno bipolar puede poner en peligro la vida debido a sus bruscos picos de manía y rápidos descensos a la depresión. También puede ser angustioso y peligroso para las personas cercanas al paciente. A continuación se enumeran cinco marcadores frecuentes del trastorno bipolar que no debe pasar por alto.
Menor necesidad de sueño
Los patrones de sueño cambian significativamente en comparación con los patrones de sueño normales. Las personas con este trastorno suelen tener dificultades para dormir. Durante el periodo depresivo, el paciente puede dormir en exceso y sentirse constantemente agotado. Lo contrario ocurre durante un episodio maníaco, ya que puede que nunca se sientan fatigados.
Las personas que sólo duermen unas horas cada noche pueden indicar trastorno bipolar, tristeza o ansiedad. Una situación en la que uno puede trabajar bien con cuatro o cinco horas de sueño durante semanas sin signos de agotamiento o deterioro cognitivo puede indicar manía.
Pensamientos acelerados y habla acelerada
Algunos individuos son charlatanes por naturaleza, pero uno de los signos más frecuentes del trastorno bipolar es el habla forzada. Si no puede captar sus pensamientos porque salen de la pantalla del teleprompter de su cerebro, dando lugar a un montón de balbuceos incomprensibles, es posible que padezca un trastorno bipolar. Además de hablar con rapidez y cambiar de un pensamiento a otro, una persona en fase maníaca también puede distraerse con facilidad.
Inquietud, agitación e irritabilidad
Imagina a una persona que se sienta en un restaurante sólo dos minutos antes de agitarse y necesitar pasar a la mesa de al lado, es demasiado ruidosa para la camarera, demasiado lenta y su silla se tambalea demasiado. De repente, ya no me apetece la comida que sirven en ese restaurante.
Todos estos son signos de agitación, inquietud e irritabilidad que podrían apuntar a un trastorno bipolar. Cuando esto ocurra, debes buscar ayuda psiquiátrica. La manía bipolar se manifiesta por incapacidad para permanecer sentado e irritabilidad.
Exceso de confianza e incapacidad para terminar las tareas
Un repentino aumento de confianza puede sugerir que se está experimentando un episodio maníaco. Por ejemplo, afirmaciones infundadas como creer que su escrito tiene potencial para convertirse en un bestseller del New York Times cuando no tiene experiencia en este campo puede ser señal de que algo va mal.
La creencia repentina de que posee habilidades extraordinarias que alterarán el curso de la historia en un plazo corto e impracticable también puede ser un indicador de que necesita sentarse con un psiquiatra.
Sinceramente, la falta de inseguridades sugiere un exceso de confianza. En ese caso, puede confiar en un psiquiatra, ya que esa arrogancia…
las autoevaluaciones sugieren un episodio maníaco de trastorno bipolar.
A veces, una persona con trastorno bipolar puede tener problemas para terminar las tareas. Aunque tengan un exceso de confianza, el cambio de humor puede hacer que pospongan tareas o las abandonen por completo.
Comportamiento impulsivo y arriesgado
Durante una fase maníaca, las personas con trastorno bipolar pueden tener la autoestima inflada. La mayoría de la gente conoce el síntoma de la manía. Las compras compulsivas, las relaciones extramatrimoniales o los viajes en moto por todo el país son sólo algunos ejemplos de comportamientos impulsivos.
Sin embargo, lo que es impulsivo para una persona puede no serlo para otra. Si están fuera de lo normal y forman parte de un patrón más amplio de síntomas, como derroches, aventuras amorosas flagrantes e inversiones arriesgadas, puede indicar un trastorno bipolar.
Supongamos que de repente quiere dejar su trabajo de informático en la América central para convertirse en chef gourmet en un café de Nueva York o comprar tres cabañas de madera en el norte de Michigan para reformarlas. Es posible que desee consultar a un psiquiatra si el comportamiento en cuestión está fuera de lo normal.
Diagnóstico y tratamiento del trastorno bipolar en Miami
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