Nuestra personalidad se caracteriza por nuestra forma de pensar, sentir y comportarnos de un modo que nos hace únicos con respecto a los demás. Estamos influidos por nuestro entorno y nuestras experiencias, así como por las demás personas de las que nos rodeamos y los rasgos heredados que se van moldeando con el tiempo.
Nuestra personalidad suele ser la misma a lo largo del tiempo, aunque nuestros puntos de vista cambien o maduremos. Sin embargo, alguien con un trastorno de la personalidad es otra historia.
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¿Qué es un trastorno de la personalidad?
Un trastorno de la personalidad es una enfermedad mental caracterizada por patrones de pensamiento duraderos, generalizados y perturbadores. Lo mismo ocurre con los comportamientos y estados de ánimo en relación con los demás. En otras palabras, una persona con un trastorno de la personalidad tiene una forma de pensar, sentir y comportarse que se desvía completamente de las expectativas normales de una cultura determinada.
Los trastornos de la personalidad suelen causar a las personas una gran cantidad de angustia y otros problemas de deterioro funcional durante largos periodos de tiempo. Pueden distorsionar la percepción de la realidad de una persona, provocando comportamientos anómalos, mientras que el individuo en cuestión puede tener dificultades para reconocer su comportamiento problemático y el impacto negativo que tiene en quienes le rodean.
¿Cuáles son los distintos tipos de trastornos de la personalidad?
En realidad, existen diez tipos diferentes de trastornos de la personalidad según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5). Estos diferentes trastornos de la personalidad se agrupan en tres “clusters” o categorías principales, cada una con diferentes síntomas en común, etiquetadas de la A a la C.
Trastornos de la personalidad del clúster A
Los trastornos de la personalidad del cluster A se caracterizan principalmente por patrones de pensamiento y comportamientos inusuales y excéntricos. También giran en torno a relaciones muy limitadas, ya que provocan que las personas se muestren desconfiadas, distantes, desinteresadas e incómodas cuando se trata de otras personas.
Los trastornos que se incluyen en la categoría Cluster A son:
● Trastorno paranoide de la personalidad
● Trastorno esquizoide de la personalidad
● Trastorno esquizotípico de la personalidad
Trastornos de la personalidad del clúster B
Los trastornos de la personalidad del cluster B se relacionan a través de comportamientos dramáticos y erráticos durante los cuales las personas mostrarán emociones intensas e inestables así como comportamientos impulsivos. Los trastornos de la personalidad del cluster B suelen tener su origen en una imagen distorsionada de uno mismo y en la falta de autoestima, lo que puede provocar comportamientos destructivos, una necesidad abrumadora de llamar la atención de los demás, sentimientos de superioridad e incluso falta de empatía.
Los trastornos de la personalidad del clúster B incluyen:
● Trastorno antisocial de la personalidad
● Trastorno límite de la personalidad
● Trastorno histriónico de la personalidad
Trastorno narcisista de la personalidad
Trastornos de la personalidad del cluster C
Los trastornos de la personalidad del clúster C suelen implicar ansiedad y miedo graves. Las personas que pertenecen al Grupo C pueden ser increíblemente pegajosas o depender de otra persona para que las cuide, evitar la interacción social por miedo a ser juzgadas y rechazadas, o tener problemas extremos de control.
Los trastornos de la personalidad incluidos en el Cluster C son:
● Trastorno de la personalidad por evitación
● Trastorno de personalidad dependiente
● Trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad (TOCP)
Los trastornos de la personalidad figuran entre las enfermedades mentales menos conocidas. Se cree que están causadas por diversos factores, como traumatismos, cambios en la química cerebral, factores genéticos e incluso culturales. En muchos casos, las personas tienen más de un tipo de trastorno de la personalidad, pero no ven que su comportamiento sea un problema y, por lo tanto, no buscan tratamiento.
Aunque no existen medicamentos diseñados para tratar los trastornos de la personalidad, los profesionales de la salud mental suelen recetar medicamentos para aliviar los síntomas de ansiedad y depresión asociados a estos trastornos junto con terapia de conversación y terapia cognitivo-conductual para ayudar a controlar la afección.
Si cree que necesita tratamiento para un trastorno de la personalidad, nuestros psicoterapeutas y clínicos psiquiátricos están a su disposición para ofrecerle un tratamiento validador. Póngase en contacto con nosotros para concertar una cita.